Decir NO a un perro

Decir no funciona.

¿Funciona? ¿En serio?

En serio.

A corto plazo decir no puede funcionar perfectamente. Igual que puede funcionar “cansarle” para que se duerma o darle un hueso para que se calle.

¿Cansar a un cachorro para que se duerma puede funcionar? Si. ¿Es beneficioso? ¡En absoluto!

¿Darle un hueso para que se calle puedo funcionar? ¡Por supuesto! ¿Es bueno? ¡Para nada!

Pues ya estaría. Eso es lo que sucede con el NO.

Funcionar, funciona, al menos a corto plazo. Otra cosa es la factura que va a pasarnos.

Que algo funcione, o funcione en un principio no quiere decir que ese algo nos termine dando el resultado esperado o incluso creando un problema más grande del que queremos solucionar.

 

Si el NO es “solo una palabra” ¿Cómo puede hacer daño?

¿Jugamos? Estas leyendo este texto, construyendo teorías, opiniones y demás en tu cabeza, ahora, por favor, tócate la nariz. ¡NOO! ¿No qué? No pienses, no respires, no te la toques, no te la toques así, no has obedecido, has obedecido incorrectamente.

Estás descansando en un banco del pipican y tu perro, lleno de barro se dirige hacia ti ¡NOO! Mientras, tu perro se ha sentido muy amenazado por una situación y había pensado que era buena idea buscar ayuda en su persona, pero ¡nooo! No es un lugar al que ir al tener miedo, o eso parece en esta ocasión.

NO es solo una palabra que solemos usar para pedirles que paren, forma parte de nuestro vocabulario y abusamos enormemente de ella convirtiéndola muchas veces en un castigo no físico.

Aquí puedes leer más sobre los castigos: https://www.dogcalm.com/articulos/sin-castigos/

Aquí puedes leer sobre las correcciones: https://www.dogcalm.com/articulos/desintoxicate-de-las-correcciones/

 

 

10 consecuencias del uso y abuso del NO

  1. No aporta información sobre la conducta deseada.
  2. Aprenden a no ofrecer, perdiendo la confianza.
  3. Favorece respuestas de miedo.
  4. Alimenta la frustración y la ansiedad.
  5. Enseña a cortar conductas “bruscamente”, algo que puede imitar con marcajes.
  6. Crea un apego inseguro. Aquí puedes leer sobre el apego https://www.dogcalm.com/articulos/que-es-el-apego/
  7. Aprende a realizar ciertas conductas a escondidas.
  8. Puede sustituir esa conducta por una todavía peor.
  9. Puede incrementar la respuesta.
  10. Haces hincapié en las malas conductas.

¿Y que hago cuando no quiero que haga algo?

Recuerda que tu perro no es adivino.

No le envíes información que mina su confianza.

Si quieres que suelte algo que no debería coger:

  1. No lo dejes a su alcance.
  2. Pídele que lo suelte. Esto requiere que previamente le hayas enseñado a soltarlo.

Piensa que es lo que necesitas que haga y que cómo puedes conseguirlo.

Si por ejemplo quieres que no ladre cada vez que suena el timbre… de poco te sirve ladrar (¡NO!) o reaccionar para conseguirlo.

Y si necesitas ayuda profesional, no dudes en solicitarla.

 

Cinta Marí ©, 2022

Además de la atención personalizada, disponemos de academia online.

Estos son algunos los cursos que puedes realizar a tu ritmo:

Deja un comentario

Abrir chat
¡Hola!
¿En qué podemos ayudarte?